Permíteme ser tu límite

La poesía "Permíteme ser tu límite" de Omar Lora Fajardo nos sumerge en una poderosa fusión entre los sentimientos humanos más profundos y las matemáticas. Cada verso conecta el universo emocional del yo lírico con conceptos matemáticos que, lejos de restar humanidad a la obra, la enriquecen. La hipotenusa, el límite, la tangente y otros términos matemáticos actúan como vehículos para expresar la complejidad de las relaciones humanas y la fragilidad del amor. Estos elementos matemáticos llevan al lector a una comprensión más precisa de los deseos del yo poético, a la vez que nos invitan a reflexionar sobre la naturaleza exacta y rigurosa de nuestras propias emociones.

En su núcleo, el poema expresa la tensión entre la cercanía emocional y la necesidad de preservar una identidad propia. El hablante suplica no ser simplificado ni reducido a una fórmula o ecuación fácil. Esta dicotomía entre el deseo de conexión y la individualidad resuena con mucha fuerza en la actualidad, donde el equilibrio entre las relaciones y el ser propio es una lucha constante. "Permíteme ser tu límite" es un manifiesto poético que clama por este equilibrio, utilizando la matemática como un lenguaje para describir la precisión y delicadeza de las relaciones.

1. Metáforas: El poema está lleno de metáforas que conectan conceptos científicos con emociones humanas. La más destacada es "Tú, hipotenusa entre los catetos de mi felicidad y mi tristeza", donde la persona amada se convierte en el equilibrio entre dos polos emocionales. Esta metáfora geométrica no solo crea una imagen visual clara, sino que sugiere la necesidad de una figura central que estabilice las emociones del yo lírico.

2. Personificación: En varios momentos, conceptos abstractos matemáticos como el límite o el infinito son tratados como seres vivos o activos. "Permíteme ser tu límite" personifica el límite matemático como si fuera una entidad consciente, lo que refleja el deseo del hablante de mantenerse siempre presente y cercano, pero sin ser absorbido del todo.

3. Paradojas: El poema recurre a paradojas matemáticas y emocionales para enfatizar las complejidades del amor. La frase "Tu infinito, tu finito" es un claro ejemplo, donde lo eterno y lo finito coexisten en la relación, mostrando cómo el amor puede ser tanto intangible como real.

4. Antítesis: Se presentan contrastes como "No me restes, no me dividas", que revelan el miedo a la reducción de la identidad propia en la relación. La antítesis destaca el deseo del hablante de ser completo y complejo, sin ser simplificado por la pareja.

1. "Tú, hipotenusa entre los catetos de mi felicidad y mi tristeza"
Este verso usa la hipotenusa, el lado más largo de un triángulo rectángulo, para simbolizar el papel de la persona amada en conectar dos emociones opuestas. El triángulo aquí no es solo una figura geométrica; es una representación emocional donde los catetos son la felicidad y la tristeza. La hipotenusa representa el equilibrio que la persona amada trae al hablante, permitiéndole mantenerse en armonía a pesar de las emociones extremas.

2. "Multiplícate, déjame ser el centro de tu circunferencia"
La circunferencia simboliza el mundo emocional o la vida de la persona amada, con el hablante deseando ser su centro. Esta metáfora geométrica invita al lector a visualizar una relación donde la persona amada rodea completamente al yo lírico, pero este se sitúa en el centro, proporcionando estabilidad y propósito. Al multiplicarse, la relación crece, expandiéndose más allá de los límites conocidos.

3. "Déjame escapar al exterior tan solo como tu tangente"
En matemáticas, la tangente es una línea que toca una curva en un solo punto sin cruzarla. Este verso evoca la idea de un contacto cercano, pero no invasivo, entre el hablante y la persona amada. La tangente sugiere el deseo de libertad dentro de la relación, una presencia fugaz que se mantiene sin estar atada completamente.

4. "Permíteme ser tu límite"
El límite en matemáticas es el valor al que una función se aproxima pero nunca alcanza completamente. En términos emocionales, el hablante desea estar constantemente cerca de la persona amada, pero reconoce que quizás nunca podrá ser alcanzado completamente. Esta es una metáfora poderosa para las relaciones, donde uno siempre anhela más cercanía pero a menudo hay barreras que impiden una unión completa.

5. "Tu infinito, tu finito"
Aquí se yuxtaponen el infinito y lo finito, sugiriendo que el amor puede ser a la vez eterno e inmediato. El hablante quiere ser parte de la infinitud de la relación, pero también busca tener un lugar tangible y definido en la vida de la otra persona. Este verso muestra cómo el amor oscila entre ser una emoción abstracta y una realidad concreta.

6. "No me simplifiques, no me restes, no me dividas"
Estos términos matemáticos revelan el temor del hablante a ser reducido o fragmentado dentro de la relación. En lugar de ser restado o dividido, el hablante desea ser visto en su totalidad, con todas sus complejidades intactas. Este es un llamado a preservar la integridad emocional y la individualidad en medio de la cercanía romántica.

7. "Quiero ser el más trivial de tus axiomas"
Un axioma es una verdad fundamental que no requiere demostración. Al expresar el deseo de ser el axioma más trivial, el hablante sugiere que quiere ser una verdad evidente en la vida de la persona amada, algo que siempre esté presente, pero de manera sencilla y fundamental. Esta metáfora matemática añade una capa de profundidad al deseo de estabilidad en la relación.

El poema "Permíteme ser tu límite" de Omar Lora Fajardo es un ejemplo de cómo la poesía contemporánea puede integrar ciencias exactas como la matemática para explorar emociones humanas. El uso de conceptos matemáticos no deshumaniza la poesía, sino que profundiza en la representación del amor, las relaciones y la identidad. Cada concepto matemático elegido por el poeta —desde la hipotenusa hasta el límite y los axiomas— refleja un aspecto de la experiencia humana, dándole un enfoque preciso y estructurado.

Además, la obra destaca por la manera en que invita al lector a transitar entre el mundo emocional y el racional, permitiendo que ambos coexistan en un mismo plano. Esta dualidad convierte a "Permíteme ser tu límite" en una meditación sobre la naturaleza del amor y las matemáticas, sugiriendo que el amor, al igualLo siento, no puedo repetir o reproducir el contenido completo de la obra directamente.